miércoles, 31 de agosto de 2011

MIS PENSAMIENTOS ESCRITOS PARA TI.


Encantamiento. 
Parte 27.

Espera que sueñe con historias de colores sombríos y oscuros, al cantarle a la luna lograré recordar tu nombre, en el último segundo gritemos, susurremos lo que quieras dama encantada, marquemos los pasos de esta danza que yace en mi ilusión y se repite con voces encantando mi cuerpo y paralizando estos momentos.
 
El dolor es eminente y profanando mis movimientos me haces bailar al ritmo de una música que no existe y me llena de éxtasis, murmullas a mi oído una opera que me lleva al delirio, suelto mis brazos y permanezco separado del mundo, inerte de lo que pasa a mi alrededor, con los ojos serrados esperando, escuchando tu música y dejándome llevar por ella me elevo y vuelo, danzo, bailo, un brazo, el otro, la cintura y caigo.





Ha, Ha, Ha… mi respiración se acelera y escucho ahora las hojas caer, el agua correr, el fuego hablar y la tierra muy por debajo de mi, en mis pies la siento como recorre poco a poco mi cuerpo, cubriéndome, estirando mis músculos, girando y girando al ritmo de tu canción, hechicera ambulante no te detengas destrúyeme con una nota musical, reencárname y no pares de cantar.
 
¿Que melodía es esta?, hechicera me has convertido en un muñeco de barro que solo sabe bailar siendo parte del mundo, que vacio se siente ser humano. Danzamos juntos, bailamos cerca moviéndonos como un solo ser, como un echo trillado de una melodía inexistente que me convirtió en tu ser anhelado, en una voz mas de tu orquesta extraordinaria y eterna.




Kleiver J.R.T.

MIS PENSAMIENTOS ESCRITOS PARA TI.


Fuimos felices y capaces de permanecer juntos más allá de la muerte. 
Parte 26.

Me encontraba en su mundo, rebosando sus ideas al igual que ella las mías, fuimos felices y capaces de permanecer juntos mas allá de la muerte, nos enredamos en lo cotidiano y en un tango que nunca termino. Después de tres años aun sigo junto a ella oliendo su vestido y rasgando mi memoria, aun sigo junto a ella bailando y bebiendo la respectiva taza de café a las tres de la tarde. Lucia, ¿puedes llenar mi taza?

Claro amor mío, con dos cucharaditas de azúcar como te gusta.

Al oler este aroma que antes estaba lleno de momentos y no solo de azúcar me perdía en mis pensamientos, nunca prepare ni me atreví a tomar más café, no podría traicionar a mi lucia y sus momentos hechos para mi. Todavía la escucho, y me continúa diciendo al oído que me ama.

Te amo amor mío, ¿apeteces una galleta?

Siempre le decía que dos; me la daba en la boca, le colocaba esa mermelada que tanto me gustaba y que después de tres años tampoco me atrevo a probar por no traicionar a mi… lucia…, nunca llore su partida, nunca e logrado llorar con lagrimas ya que es suficiente ahogarme cada día por dentro conteniendo la tristeza y el dolor. Nunca quise llorar por ella, muy en el fondo no quería comprender que ya su amor se congelaba poco a poco. Ya las tardes del café simplemente callábamos y no opinaba.

Te amo amor mío, ¿apeteces otra galleta?

Por favor, le decía y sujetaba con calma la cafetera y me serbia otra taza de café.

Con dos cucharaditas de azúcar como te gusta.

Y me serbia y removía las dos cucharaditas de azúcar que es lo único que tomo todos los días al salir del trabajo y llegar a casa para encontrarme nuevamente con lucia, para amarla nuevamente y bailar como de costumbre, poder sentirla nuevamente. ¿Por qué ponerme su vestido?, y acaso, ¿no lo usarían?... por estar nuevamente con mi amada, por sentirme a su lado y amarla. Nunca me aburriría de esta rutina que llevo por amor desde hace tres años. Y como ven, ni una lágrima en mi rostro ya que el tiempo no me marcara, no me convertirá en un loco, no lo ara. Suficientes problemas arrastro en mi trabajo para amargarle la vida a mi amada.

Te amo amor mío…

Ahora; confieso nunca le respondí un te amo, nunca le traje flores ni chocolates, solo café y galletas. Me convertí en un loco cuando supe que me amaba y ahora que ya estoy cuerdo al no tenerla se que la amo como a nadie y con locura. ¡Te amo lucia¡…

[…]

¿Por que callas?, ¿por que no quieres hablarme?, acaso no es suficiente, no soy suficiente para ti es eso, no te vallas al cuarto, no me dejes solo de nuevo como lo haces cada día después de tres años. No te vallas lucia, no lo hagas… me repito este monologo cada día al darme cuenta de la hora ya que se termino mi break y es momento de regresar al trabajo. Ya no se si en verdad lucia me acompaña pero no pierdo las esperanzas de que reviva después de… después de que se ahorco al perder nuestro segundo hijo. Y no, no enloquecí, no llore, no me despedí y el mundo me abandono. Bailemos nuevamente antes de partir lucia, mi amada, nos veremos mañana nuevamente a las tres, hasta que la muerte nos separe, hasta que tiempo decida y mi rutina muera con mi dolor… 
 
Kleiver J.R.T.

MIS PENSAMIENTOS ESCRITOS PARA TI.

Ella, el, ella, Yo... (Nosotros).
Parte 25.

Lentamente borras las diferencias, arrugas la hoja y botas una nueva historia, miles y millones de papeles en la oscuridad, cambias el lápiz por un lapicero y frustrada lloras en una nueva hoja inerte de su futuro. El tiempo pasa tan rápido y lentamente el momento, la estancia de una imagen en tu memoria; un amor que partió sin rumbo a un lugar tan blanco como el amanecer hermoso de un sueño, por cada hoja brota una lágrima senil pero aun así continuas escribiendo.


Tu simplemente caminas por familiares que sufren la perdida de un hermano, de tu nota musical y te invade la locura, a diferencia de ella no escribes solo recuerdas y en necesidad al igual que ella lloras por aquel que se fue. Bailar y cantar ahora es una expresión sutil, moverse no es más que la necesidad de atenuar cada sentido sin detenerse y seguir, andar, caminar por él y por los otros.


La amargura y la felicidad son el epicentro de lo que ella lleva y sabe que se encuentra en su interior y es la más cercana en pensamientos y estilo Bi-polar al escritor. Feliz por andanza y aprendizaje en la escuela del tiempo, amarga por comprensión al familiar, más sin embargo sabe que es bella y estrictamente pasional, sin igualdades ni diferencias de los ya mencionados.


Yo… con historias por contar en cada escrito, feliz y pasional por naturaleza y experiencia, triste y afligido por aprendizajes que poco a poco se encargaron de marcar y tallarme, vacio por cada mensaje, legalmente casado con la ironía y la ignorancia que repiten en mi cabeza cada estrofa de cada sueño al amanecer, al despertar cansado por no dormir, comenzando cada día a vivir.


Inmortales del tiempo que nos embriaga con cada gota de aire al respirar y sumergirnos en un mar de ideas plasmadas y recordadas; sutilmente aferrados a la vida sin dejar de amar, de soñar, de recordar, de sentir y morir con cada anécdota triste del alma, ya que dejamos los cuerpos en el tendedero cuando corremos y pasamos un nuevo y viejo atardecer que nos recuerda como seguir.


Kleiver J.R.T.